¡Cuervos días!

Y puede que más cuervos que nunca, aunque primero deba disculparme por mi pequeña ausencia (El arranque de la rutina nos vuelve locos a todos). ¿Aún no habéis oído hablar de este libro? Mal, muy mal. Suerte que estoy yo para "cuervetizar" vuestro final del mes con la reseña de nuestro casi tocayo.


"Ketterdam: Un desbordante foco de comercio internacional donde todo se puede conseguir por el precio adecuado, como bien sabe el prodigio criminal Kaz Brekker. A Kaz le acaban de ofrecer la oportunidad de llevar a cabo un gran robo, un arriesgado golpe que podría hacerle más rico de lo que se jamás se ha atrevido a imaginar en sus sueños más salvajes. Pero no podrá llevarlo a cabo por sí solo: tendrá que reclutar a un peculiar equipo formado por un convicto, una espía, un pistolero, una Grisha, un ladrón y un fugitivo. Aunque ellos no lo saben, llegado el momento los miembros del grupo de Kaz serán los únicos capaces de salvar el mundo de la aniquilación total. Bueno, lo serán si no se matan entre ellos primero."

Hace tiempo que tenía el antojo de leer alguna novela relacionada con cuervos, porque sí, es lo suyo llevando el blog el nombre que lleva. Miré muchas y ninguna me terminó de convencer salvo un par de títulos, entre los cuales figuraba "six of crows"... y sí, su fantástico trabajo de maquetación influyó en que el libro captara mi interés pero no fue el gran culpable. Saber que estaban a punto de editarlo en español sí lo fue.

Seis de cuervos es una bilogía (Y la editorial ya ha confirmado que publicará el desenlace de la saga en 2017) que pese a las apariencias no se debe confundir con otras novelas juveniles, ya que escapa bastante bien de muchos tópicos del género y nos ofrece una historia refrescante y original. Tenemos a seis protagonistas que se reparten el peso de las tramas y de los cuales, además, se nos van revelando detalles a cuentagotas. Todos tienen algo que contar y no acaban convertidos en meros peones sin personalidad, detalle que en muchas ocasiones puede cargarse hasta la historia más prometedora. ¿Mi favorito? Tal vez Nina, por ser la que más mantiene la esencia original de la Trilogía Grisha que lanzó a la fama a su autora. Y antes de que lo preguntéis... no, no es necesario leerla para aventurarse con esta novela. Transcurren en el mismo mundo de ficticio, pero son historias independientes. Otra cosa es que, por supuesto, el que haya leído la trilogía parta con ventaja y pueda encontrarse pequeñas anécdotas que de otro modo pasarán desapercibidas a ojos del lector.

Y aunque a mi me fascine la perspicaz y temeraria Nina, sé que el favorito de muchos/as será Kaz, ya que no es solo el típico chico de pasado turbulento y misterioso, esos que tanto gustan y nunca faltan, sino que además juega muy bien sus cartas (Un seis de cuervos) engañándonos y manteniendo su auténtica historia en una constante incógnita (Tanto que ni los demás personajes saben darnos respuesta). En conclusión, parte siendo un personaje típico pero su historia le hace romper los patrones establecidos y no recordarnos a otros protagonistas masculinos de las novelas del género. No es que quiera insistir, pero al menos yo he llegado a tener muchas veces la sensación de estar frente a una historia plana con personajes que ya he conocido en otra página y pluma. Aquí esto no pasa. Leigh ha sabido traer a la vida a estos seis criminales y ladrones para adaptarlos en una historia de la que todos podemos disfrutar.

- Eres la persona más joven en llevar una casa de apuestas y has doblado sus beneficios en ese tiempo. Eres un chantajista..
- Negocio con información.
- Un estafador..
- Creo oportunidades.
- Un chulo y un asesino...
- No trabajo con putas, y siempre mato por una causa.
- ¿Y qué causa es esa?
- La misma que la tuya: Beneficios.

Sin llantos. Sin funerales. La novela nos mete en un ritmo trepidante lleno de acción, diálogos hilarantes y las siempre esperadas situaciones románticas. He de decir que en ese aspecto no me sorprendieron, sabía desde el principio quiénes acabarían tonteando o enamorándose... el roce hace el cariño, los que se pelean se desean, etc, etc, etc. Pero pese a lo corriente que pueda sonar, disfruté de dichas escenas. No son flechazos instantáneos (Esos sí que los odio) sino que todas las historias vienen de tiempo atrás, se nos van completando a medida que avanza la lectura y generan la sensación de querer saber más, de no tener suficiente, de vivir en una constante incógnita que no sabes hacia dónde puede llevarte. ¿De verdad son de fiar nuestros seis protagonistas? ¿Acabarán todos con vida? Preparaos para sufrir.

Como ya he dejado caer, la edición es otro de sus puntos fuertes. En la edición española nos le han traído con tapa dura y sobrecubierta, donde las letras poseen relieve y un tono rojizo de un brillo superior a la portada. A esto hay que sumarle (Lo más importante) que las páginas no se ven blancas o amarillas como suele ser habitual, sino que el canto de todo el tomo está en negro. Venga, decidme quién es el listo que ve eso en una librería y no se para, como mínimo, a mirar. Desde luego en marketing merecen un 10.

Hacía demasiado tiempo desde mi última lectura en el género fantástico y he de reconocer que la espera ha merecido la pena. Seis de cuervos es, con todos los honores, de lo mejor que he leído este año. Incluso si no es vuestro género predilecto, y sé que para muchos de los que me leéis no lo será, tiene toques oscuros que no la hacen una lectura predecible ni suavizada de cara a su posible público. Aunque yo lo que más les agradezco es que nos saquen de los géneros más de moda y explotados, como los zombies o los vampiros, que no es que me caigan mal pero ya iba siendo hora de traer sagas nuevas y con ganas de dejar huella.



¿Conoces a la autora o el libro? ¿Qué impresión te da? Tus comentarios son bienvenidos, y si quieres recomendarme futuras lecturas donde estas aves estén implicadas... soy toda ojos.




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¡Cuervos días!
Espero que la vuelta a la rutina no se os esté haciendo muy cuesta arriba... hoy vengo con la reseña de toda una novela de culto, o al menos así la han querido clasificar distintos medios. ¿Preparados para conocer la azarosa religión de los dados?


"En el hombre de los dados , un exitoso psiquiatra neoyorquino, que comparte nombre con el narrador de esta historia, entra en crisis (o más bien en barrena) y comienza a poner en duda los procedimientos «científicos» que lo han convertido en una eminencia. Esa incertidumbre lo llevará a abrazar el azar como paliativo para la neurosis y los dados como antídoto contra el agobio de la libertad cotidiana. El médico de almas se abandona a una alegre espiral de sexo, droga, violencia y mentira que, paradójicamente (o no), le abre de nuevo las puertas del prestigio social: miles de chalados lo admiran con devoción religiosa y se convierte en el mesías de una secta descabellada. Y lo que para él empezó como un juego acaba en infierno y para nosotros en una catarata de risas.

¿Moraleja? Tal vez no hay respuestas inapelables; tal vez debemos aprender a vivir con nuestros demonios; o sea, a convivir con nosotros mismos. O tal vez ocurra lo opuesto. Aunque lo más probable (dentro de lo aleatorio) es que no tengamos ni la más remota idea."

Desde el principio nos queda patente que estamos ante una novela de tono transgresor, algo que como imaginaréis la convierte en no apta para todos los públicos. Su ritmo es psicodélico, no ofrece descansos y pasa de una escena a otra como si nos guiara un azaroso capricho de los dados. ¿Pero de dónde viene el título y a qué se refiere exactamente?

Luke está harto de su vida, de su rutina, de su trabajo y hasta de su familia. Siente tal aburrimiento que un buen día, cuando recoge unos dados, se le ocurre la idea de plantear una serie de posibilidades y dejar que el azar decida qué acción de todas va a cometer. Así empieza una adicción de la que ya no será capaz de escapar y cuyas erráticas decisiones influirán de manera devastadora sobre todos los ámbitos de su existencia. Luke decide entregarse a las decisiones del dado sin cuestionarlas, por ilógicas o inimaginables que sean. Pero... ¿Y si un día el dado le ordenara asesinar a alguien?

—Yo siento amor por los que sufren, por los que padecen la tortura de los demás, pero no por los mequetrefes que manejan los mandos. No, por los torturadores no siento amor.
— ¿Y quiénes son esos?
— Tú, tío, y todos los que estáis en situación de poder cambiar el rumbo, de hacer parar la maquinaria o de reventarla.


De este modo el autor nos lanza a la cara diversas cuestiones de las que el lector es incapaz de escapar. Nos habla de las convenciones morales impuestas por nuestra sociedad, de cómo nos reprime y maneja hasta niveles inimaginables y cómo su devoto protagonista lucha por escapar de todas esas cadenas. Luke pasa a ser "el hombre de los dados" y cree tan ciegamente en su nuevo Dios que no tardará en buscar nuevos seguidores dispuestos a compartir sus creencias.

¿El resultado? Una personalidad autodestructiva que no deja títere con cabeza y se cuestiona absolutamente todo lo que encuentra a su paso, causando nuestro asombro o incluso repugnancia. El libro se atreve a experimentar con terrenos nunca antes sondeados, que a su vez abrirán nuevas incógnitas en las mentes más curiosas. No faltan conversaciones hilarantes con las que sonreiremos como idiotas, discursos de los que te será imposible olvidarte o situaciones alarmantes que generarán un delirante caos a su paso. 


En la terapia de los dados, animamos a nuestros pacientes a tomar decisiones tirando los dados. El propósito es acabar con la personalidad. En su lugar, deseamos crear una personalidad múltiple: Un individuo incoherente, inestable y progresivamente esquizoide.

A medida que avanza siente la necesidad de aumentar la dificultad de las acciones que deja en manos del dado. Así, Luke terminará inculcando esta religión a su propio hijo y a algunos de sus colegas y pacientes. Mi favorito es sin duda Eric Cannon, un interno del manicomio donde ejerce gran parte de sus consultas. El encuentro entre ambos nos hace plantearnos constantemente dónde queda la fina línea entre enfermedad y cordura, y comprobar que nuestro protagonista ha perdido por completo el control de su vida. La historia progresa en su cauce hexagonal y sin frenos hacia un final caótico y descontrolado del que no sabemos ni qué esperar. Y eso es bueno.

La obra aparece escrita en forma de autobiografía e incluye cartas de los pacientes de Rhinehart, así como mantras de "El libro del dado", algo así como una biblia escrita por el propio autor. Por contra, estos pequeños añadidos pueden hacer que el libro nos saque de la acción y algunos de sus capítulos se hagan más pesados, casi innecesarios.  En mi caso no me importó mucho ya que la impresión general durante su lectura fue buena.

¿Qué ocurriría si decidieras dejar tus acciones en manos del azar? ¿Hasta dónde serías capaz de llegar y en qué punto impondrías tus barreras? Ese es precisamente el juego que Luke Rhinehart (pseudónimo de George Cockcroft) nos ofrece en su novela.
  No mi voluntad, dado, mas hágase la tuya.

Me parece importante remarcar que ésta edición está publicada por la editorial Malpaso, donde siempre ofrecen una copia en digital de manera gratuita por la compra del libro en papel. "El hombre de los dados" son 573 páginas de puro entretenimiento, pero conforman un ejemplar demasiado pesado como para atreverse a sacarlo de casa. En éste caso, la edición digital es más que bienvenida.

¿Alguien se atreve a conocer a nuestro ingenioso psiquiatra?



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¡Cuervos días!
Hoy nos toca algo diferente y no por ello menos especial. Traigo la reseña de 'Herbarium', una mezcla de novela romántica con una pizca de misterio. Cuando descubres que tu propia historia y el pasado de tu familia te son completamente desconocidos... ¿Hasta dónde llegarías para saber la verdad? ¿Te atreverías a pedir ayuda al chico que te rompió el corazón? ¿Quién es 'Gideon'?
Conozcamos mejor esta adictiva novela que tanto parece gustar.


"Un oscuro secreto familiar hizo que Sarah se marchara de Oxford a los dieciocho años. En su huída a Brasil dejó atrás una vida. Pero cinco años después, tras la muerte de su padre, se ve obligada a regresar. Quiere ver a su abuela Sylvia, la mujer que la crió de niña y que ahora sufre Alzheimer. 
Sarah cree que estará solo unos días, pero cuando va a la Universidad donde su padre era profesor de química descubre que él se ha pasado los últimos años estudiando a Jane Eyre y buscando los dibujos de unas misteriosas flores, las flores de Gideon. 
¿Quién es Gideon? ¿Qué significan esas ilustraciones? ¿Qué tiene que ver Jane Eyre en todo esto? Aunque su abuela parece conocer las repuestas, no puede ayudarla. 

Lo más paradójico es que el único que puede hacerlo es Liam Soto, profesor estrella de la Universidad de Oxford, el mayor experto en Jane Eyre de Inglaterra y él ni quiere ni puede estar cerca de Sarah. 
A través de las flores de Gideon, Sarah descubrirá el pasado de su abuela y una gran historia de amor que tal vez la ayude a recuperar su vida y le dé las fuerzas necesarias para desenterrar lo que de verdad se esconde en su corazón."

Muchos sabéis que el género romántico no es mi predilección, pero aun así siempre me gusta leer alguno de vez en cuando por cambiar de estilo. Intento que tengan buena pinta, obvio. Y con este... con este me temo... que acerté de lleno.

La historia nos presenta a Sarah, una joven que acaba de regresar a Londres con un montón de incógnitas a sus espaldas. Pero de nada sirve sentir curiosidad por su pasado ya que enseguida nos introducen el personaje de Sylvia, su abuela, que en este caso está perdiendo sus recuerdos. Es muy fácil darse cuenta de que la historia no solo se va a centrar en los amores que marcan la vida de ambas mujeres, sino también en todos esos fragmentos que nos faltan en el puzzle y por ley van a hacernos desear conocer. Me gustó muchísimo que mezclara tramas amorosas con misterios, conflictos, sembrando la duda y dando relevancia a la relación de nieta/abuela por encima de cualquier otra.

No es la típica novela romántica. Sí, puede sonar tópico pero es algo que sentía la necesidad de resaltar. Tal vez llegando a las últimas páginas si que se nota más la intención de la autora de crear una historia de amor memorable, aunque haya momentos en los que se compliquen de manera innecesaria (Ahora juntos, ahora separados, hoy te quiero, mañana no...). Suerte que ahí están los recuerdos de Sylvia para hacer el salve, presentándonos un romance que bien podría estar sacado de las novelas de Charlotte Brontë. Pasional, peligroso y confinado al fracaso.

El amor de algunos de sus personajes por Jane Eyre (No entraré en detalles para no desvelar por qué es tan especial) también nos acerca mucho a la literatura, vendiendo la historia con tanto éxito que es difícil escapar de esta novela sin querer empezar de inmediato a leer a la citada Brontë.



Una foto publicada por Meg Raven (@elcuervodealasrotas) el


Respecto a los personajes, para mi gusto están muy cuidados y tienen su personalidad bien definida, sin ser ninguno realmente detestable. Encontramos a los cuatro pilares de la obra, a los padres y hermanos de Gideon, un misterioso y seductor abogado, al padre de Sylvia y el que fuera su marido... como digo, múltiples historias que hacen que el romance solo sea una pieza más, pero no la única base de la novela. Tal vez, por poner una pega, hubiera agradecido que cierto antagonista tuviera más presencia en lugar de limitarse a ser mencionado en boca de otros. Qué le voy a hacer, me gusta que los finales rebosen tensión y si así nos ahorramos que las idas y venidas de sus enamorados colmen toda la atención, mejor que mejor. En este caso debo decir que Anna salva la situación mezclando tiempos, flashback, lagunas mentales, historias con mucha ternura y un amor tan puro que ni siquiera sentí forzada esa batalla constante de la pareja protagonista por estar juntos.

Ahora pensaréis... ¿Y las flores? ¿Y Gideon? Bueno, hay cosas que es mejor no revelar. Disfrutaréis mucho más de los misterios del libro si os sumergís en él dejando esas incógnitas pendientes. A mi personalmente me ha fascinado por su originalidad, y que incluya dibujos de las flores al inicio de los capítulos protagonizados por Sylvia es una preciosidad. Por si la portada no era suficiente prueba de la belleza de edición que tenemos delante.

Si éste es tu género pero buscas algo diferente, que pese a pecar de algunos clichés sea adictiva e impredecible de principio a fin, e incluso logre destacar y ser tu nueva obsesión... apunta, ya tienes lectura.



¿Y tú? ¿Cuál es tu historia de amor literaria favorita?